17/04/2018 AEUTRANSMER

“El acuerdo se alcanzará en los pasillos y en la última semana” en opinión de Vicente Salvador, Consejero de Transporte de la representación permanente de España ante la UE quién también expuso que las negociaciones son muy difíciles por tratarse de una directiva estratégica para todos los EE.MM.

Estas y otras cuestiones se abordaron en el Seminario sobre el paquete legislativo de la carretera que se celebró ayer en la sede del Parlamento Europeo en Madrid.

Eddy Liégeois, Jefe de la Unidad de Transporte por Carretera de la Comisión Europea confirmó el diferente enfoque existente entre los países del este y los del oeste de Europa, que se traduce en la elaboración de normativas, por ejemplo, en lo que respecta a la aplicación de las leyes nacionales de salario mínimo, que suponen un freno a la libre circulación del transporte entre los estados miembros.

Explicó Liégeois que este primer lote de ocho medidas legislativas se complementará próximamente con otras propuestas, incluidas las relativas a las emisiones después de 2020 para automóviles y furgonetas, así como las primeras normas de emisiones para vehículos pesados. Estas propuestas están enfocadas a impulsar aún más la innovación; mejorar la competitividad; reducir las emisiones de CO2 y mejorar la calidad del aire y la salud pública, y aumentar la seguridad del transporte.

Cabe destacar también la referencia que hizo el Sr. Liégeois sobre la posibilidad de permitir el descanso en cabina siempre que éste se realizara de una forma segura.

Finalmente el Jefe de la Unidad de Transporte indicó que, si se cumplen las previsiones para su tramitación en el Parlamento Europeo y en la Mesa del Consejo, la Directiva podría estar aprobada a finales de 2018.

Por su parte, la eurodiputada española Inés Ayala, transmitió que la Directiva de Trabajadores Desplazados no debería ser de aplicación ni para el transporte internacional ni para el tránsito, únicamente debería de aplicarse para el cabotaje y a partir de un determinado número de días.

La otra eurodiputada española presente en la jornada, Izaskun Bilbao, reconoció prematuro aventurar los términos de un acuerdo final y se refirió expresamente a la falta de armonización y a las diferentes aplicaciones de la legislación en los EE.MM., que sin duda obedece a ejercicios de proteccionismo.

La Sra. Bilbao resumió las enmiendas planteadas por España al proyecto relativas a:

1º. la incorporación de unas definiciones precisas;
2º. la creación de una Agencia Europea del Transporte por Carretera que actúe como ventanilla única, que facilite los trámites y descargue la presión administrativa sobre los conductores trasladándola a los operadores;
3º. el uso de la tecnología para la monitorización de vehículos y mercancías;
4º. la repercusión de las infracciones administrativas en la honorabilidad de la empresa de transporte.

Por su parte, la Secretaria General de Transporte, Carmen Librero, incidió en el papel mediador que desarrolla España al mantener una postura equidistante entre los dos bloques europeos: la Alianza por la carretera liderada por Francia, que postula la aplicación de la Directiva de Trabajadores desplazados desde el primer día, y los países del Este de Europa y Báltico, liderados por Hungría y Polonia, que no apoyan la aplicación de la Directiva al transporte.

Joaquín del Moral, Director General de Transporte Terrestre hizo un resumen de la propuesta sobre la que se está trabajando, que comprende 9 días de transporte internacional ó 5 días de cabotaje al mes, a partir de los cuales se comenzaría a aplicar la Directiva de Trabajadores Desplazados.

Se está estudiando también una propuesta danesa que consiste en que la Directiva no se aplique cuando el origen o destino del viaje coincida con la sede de la empresa.

Por último, Carmelo Gonzalez en representación de los transportistas, expuso su frontal oposición a la aplicación de la Directiva Trabajadores Desplazados al sector del transporte.