23/07/2019 EL VIGÍA
Los camiones matriculados desde el pasado 15 de junio van equipados de serie con un tacógrafo inteligente, la versión 4.0 del anterior tacógrafo digital, que incorpora numerosas novedades para dificultar su manipulación, reducir la carga administrativa y mejorar el control del sistema. Todo ello, por mandato explícito de la Comisión Europea, que revisó la legislación e introdujo el Anexo 1C en el Reglamento de Ejecución (UE) 2016/799 de establecimiento de los requisitos para la construcción, ensayo, instalación, funcionamiento y reparación de los tacógrafos y sus componentes.
Una de las principales novedades del tacógrafo inteligente consiste en una interfaz DSRC (Dedicated Short Range Communications) para transmitir datos de forma inalámbrica a las tablets de las autoridades de inspección, que recogen información con el camión en marcha sobre la identificación del vehículo, los datos de la calibración, sobre posibles infracciones de seguridad y los fallos de funcionamiento.
Además, el nuevo dispositivo dispone de un sistema global de navegación por satélite (GNSS) que registra de manera automática la información de la posición al inicio y al final de la jornada y cada tres horas de conducción acumuladas tras la activación del tacógrafo, según el fabricante Continental VDO. El GNSS obligatorio también permite aumentar la eficacia de la gestión de flotas y la organización del tiempo de trabajo. De hecho, para la Comisión Europea, artífice del cambio, “mejora en gran medida la aplicación de las normas de la UE sobre los tiempos de conducción y descanso”, ya que proporciona información a tiempo real para detectar infracciones de la legislación sobre el transporte por carretera. En este sentido, la comisaria de Transporte de la UE, Violeta Bulc, señala que el nuevo tacógrafo “favorecerá en gran medida la protección social de los conductores y, al mismo tiempo, la seguridad vial en Europa, y será una herramienta esencial para ayudar a las autoridades encargadas de la aplicación de la ley a luchar contra los fraudes y abusos”.
Podría parecer que el nuevo tacógrafo inteligente informa a la Administración de cualquier incumplimiento, y que lloverán las sanciones, pero no funciona de este modo. Para evitar entrar en conflicto con el Reglamento General de Protección de Datos de la UE (RGPD) la autoridad de control solo puede acceder, sin detener el vehículo, a 19 datos detallados en el Anexo 1C, entre los que se encuentran los excesos de velocidad, si la tarjeta es válida y si ha sido insertada durante la conducción. Además, los agentes no pueden multar a un vehículo sin detenerle porque el DSRC solo sirve para evaluar posibles indicios de manipulaciones que deben ser comprobadas después.
“Lo que pretende la teledetección es evitar parar en carretera a vehículos que en principio actúan correctamente. Se trata de evitar perder tiempo de manera innecesaria en un control si en principio se prevé que ese vehículo está actuando correctamente y no presenta indicios de infracción”, explica el secretario general de la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer), Juan José Gil, que añade: “no se puede sancionar a un transportista si no es detenido en carretera y se le hace una comprobación exhaustiva de los datos disponibles. Las autoridades tampoco pueden saber quién es el conductor del vehículo; el único dato que pueden recoger es si la tarjeta está o no está insertada”.
El consejero delegado de la consultora tecnológica Ferreira Dapía, José Antonio Ferreira, expone que “la gran ventaja para la Administración es que va a controlar mucho el sabotaje de los tacógrafos, es decir, que todo sabotaje que realicen a un tacógrafo digital nuevo va a poder controlarlo porque deja rastro”. En cambio, añade el consultor, “las empresas punteras en España no van a encontrar nada nuevo en el tacógrafo inteligente que no tengan ya. Los grandes ya tienen telematizada toda su flota y disponen de equipos que leen tacógrafos, CAN Bus y todos los parámetros de control, y cuentan con su micro big data dentro de la compañía, su pequeño sistema de información por el que pueden hacer su flota más eficiente. Desde ese punto de vista, que el tacógrafo inteligente tenga su propio sistema de geolocalización no aporta demasiado”.
Hasta el momento, solo Continental VDO ha conseguido la homologación del tacógrafo inteligente, lo que puede haber influido en el precio. Para el gerente de Truck One, Héctor Sanz, la desventaja del dispositivo se encuentra precisamente en su elevado coste. “Cuando se avería un tacógrafo y hay que cambiarlo tiene un coste alto. No sé si es tres veces mayor en caso de avería. Antes tenías que cambiar un tacógrafo y costaba en torno a 700 euros; ahora tienes que cambiar un tacógrafo y te cuesta 3.000 euros aproximadamente”. Por lo demás, valora el dispositivo como una tecnología que contribuye a cumplir la legalidad vigente: “Los tacógrafos nuevos ayudan a que el conductor controle, porque hasta ahora eran complejos de manejar”. Y aclara: “los conductores muchas veces metían la pata con los descansos, no atendían bien, se les ponía intermitente y no sabían por qué. O se les olvidaba pararlos, o le habían dado pero no lo suficientemente como para marcarlo y pensaba que le había dado, y te pueden venir multas. Trabajas de buena fe encima te ponen una multa. Los nuevos tacógrafos se ponen en marcha y en descanso automáticamente con el movimiento”.
Instalación y sensorización
El tacógrafo inteligente disponible hoy en el mercado ofrece, además de los servicios básicos, otros adicionales como son los datos del peso recogido por sensores y la información sobre el contenido del depósito, que también podrá ser determinada a través de sensores y enviada por el tacógrafo a las empresas encargadas de las tarjetas de combustible, entre otros. Para Ferreira resulta a todas luces insuficiente: “Dotar al camión de sensores inteligentes supone un problema porque en esta generación no está contemplado sensorizar al camión en aspectos relevantes como el control de frío, el termógrafo, el control de la apertura de puertas, el control de robo de combustible, sensores de caídas de nivel de fuel, volumétricos y de control de gas, entre otros”, señala.
Un instalador del tacógrafo inteligente de Electroconesa, Francisco Lozano, indica que el tiempo de revisión aumenta, ya que “el único problema que existe con el nuevo tacógrafo es el tiempo que se tarda con la verificación. Antes llevaba una hora y ahora con el nuevo lleva más tiempo porque son más laboriosas las comprobaciones”.
Transporte internacional
El paquete de movilidad de la Unión Europea prevé la entrada en vigor en 2024 (aunque esta fecha aún no está aprobada de forma definitiva) de un nuevo tacógrafo inteligente de segunda generación (tacógrafo 2) para el transporte internacional que incorpora cartografía y efectúa el control GPS con más frecuencia. “Esto significa que los nuevos tacógrafos inteligentes que se están instalando deberán actualizarse de forma inmediata para serlo todavía más”, indica el director del departamento técnico de la Asociación de Transporte Internacional por Carretera (Astic), José Manuel Pardo. En su opinión, esta situación produce “una gran inseguridad”. “Si los fabricantes tardan tanto para homologar estos nuevos tacógrafos como con los actuales, es difícil que lleguen a tiempo para cambiar tan a corto plazo la totalidad del parque que realice transporte internacional, que es bastante amplio. Tampoco se entiende por qué los tacógrafos actuales van a tener que actualizarse en plazos tan cortos, deviniendo obsoletos”, añade el representante de Astic.
El secretario general de Fenadismer destaca la relevancia de geoposicionar al vehículo en cada momento en los transportes internacionales a efectos de un mayor control de la normativa comunitaria tanto en materia de transporte internacional, en concreto, el cabotaje, como en materia de desplazamiento de trabajadores. “La próxima previsible aprobación del paquete de movilidad permitirá a los Estados miembros ejercer un mayor control sobre los trabajadores desplazados. Los agentes de control dispondrán de más información sobre los desplazamientos que realizan las empresas no residentes en el país donde operan”, indica Gil.
Las fuentes consultadas opinan que la entrada en vigor del nuevo tacógrafo inteligente contribuye a reducir las posibilidades de fraude y a mejorar la competencia entre las empresas. “La inspección pondrá el foco de los controles en las empresas más sospechosas”, señala Pardo. Pues esas serán las que tendrán que adaptarse a la normativa vigente o prepararse para ser detenidas sobre la marcha por los agentes de inspección.